Vall d’Hebron decora con motivos vikingos una de las salas de curas pediátricas del Hospital Infantil

El nuevo diseño de la sala de curas pediátricas del Hospital Infantil Vall d’Hebron se enmarca dentro del proceso de humanización del Hospital y ha contado con la colaboración de Kern Pharma. Un nuevo paso en el proceso de hacer del Hospital un lugar más amable.

Unas curas centradas en las necesidades de los niños y niñas son fundamentales en la atención y tratamiento de los y las pacientes pediátricos y por eso es tan importante cuidar el entorno hospitalario. El Hospital Infantil dispone de un total de cinco salas de curas pediátricas en las diferentes unidades de hospitalización y en éstas se hacen procedimientos y técnicas que son estresantes para los niños, niñas y adolescentes y también para las familias, puesto que es frecuente que se requiera hacer inmovilizaciones y se provoque cierto dolor y malestar a los pacientes. Por todo esto, estas salas tienen que ser lugares tranquilos y agradables donde los pacientes pediátricos se sientan seguros. En estas salas, los profesionales colocan vías y sondas y hacen analíticas, punciones lumbares, curas quirúrgicas... en los y las pacientes pediátricos hospitalizados.

La nueva sala, que ha sido bautizada con el nombre de Sala de Exploraciones Vikinga, está decorada con motivos de la cultura nórdica. Un típico guerrero vikingo, con cuernos y la espada en alto, recibe desde la puerta a los niños y las niñas, que en el interior se encuentran con las paredes decoradas con un mar lleno de peces, en la zona mitad inferior, un barco vikingo, y montañas verdes y cielo azul en la parte de arriba. Todo esto pensado para que los niños y las niñas vivan la experiencia de su paso por la sala de curas de la manera más positiva posible.

María Ángeles Aceituno, adjunta a la Dirección de Enfermería en la Atención de Hospitalización en el Hospital Infantil, considera que la nueva sala "es agradable y bonita, y sobre todo ayuda a contrarrestar el efecto negativo y el estrés que los niños y las niñas pueden sentir cuando entran en una sala de curas. Siempre es mejor que tengan una distracción, puesto que esto ayuda a rebajar la ansiedad y la percepción del dolor".

Niños y niñas también pueden distraerse con una pequeña tablet adosada a la litera en la que pueden jugar o ver videos que centran su atención mientras el personal médico lleva a cabo el procedimiento indicado. "De este modo, el niño o la niña focaliza su atención en algo que le gusta y esto contribuye al hecho que su estancia en la sala sea más agradable mejorando así su bienestar emocional durante el procedimiento y también facilita a los profesionales la realización de la técnica", dice María Ángeles Aceituno.