El alumnado de las escuelas ‘Fundación Collserola’ decora por quinto año el Hospital Infantil con el proyecto ‘Te regalo un deseo’

En la Navidad de 2021, el Hospital Infantil de Vall d’Hebron se convertía en el cuadro Noche Estrellada, de Vincent van Gogh, gracias a los alumnos de la escuela Frederic Mistral-Tècnic Eulàlia, que ayudaron a su compañera Ànnia, paciente oncológica de Vall de Hebron que entonces tenía siete años, a cumplir un deseo: llenar de estrellas Vall d’Hebron. Ya la Navidad del año anterior, Ànnia había decorado con copitos de nieve el Hospital de Día de Oncohematología Pediátrica, gracias a la ayuda de sus compañeros. Por quinta edición, los alumnos de las escuelas de la Fundación Collserola –que además de Frederic Mistral-Tècnic Eulàlia engloba las escuelas Avenç y Ramon Fuster– han venido una Navidad más a Vall d’Hebron a entregar su decoración en un acto simbólico que une arte, solidaridad y educación, marcando un nuevo capítulo en esta historia de colaboración entre Vall d’Hebron, la Fundació Collserola y la Asociación 8000 Estrellas, promovida por la madre de la Ànnia, Joana Cervera, para concienciar y promover la investigación contra el cáncer infantil.

La decoración del Hospital Infantil ha crecido hasta convertirse en un proyecto educativo de las escuelas de la Fundación Collserola: su elaboración supone una experiencia transformadora para los niños, niñas y adolescentes, que han aprendido que las pequeñas acciones pueden generar un impacto positivo en la vida de los otros y trabajan valores como la colaboración, la empatía y la solidaridad, además de las artes plásticas. Su esfuerzo redunda en el bienestar emocional de los pacientes oncológicos que se recuperan en el Hospital Infantil de su enfermedad y ven embellecido el entorno hospitalario gracias a decoraciones hechas por personas de una edad similar.

Entre las propuestas presentadas por el alumnado de bachillerato de las escuelas de la Fundación Collserola, que cada año se esfuerzan para que gane su trabajo en grupo y se materialice en la decoración de Navidad del Hospital Infantil, este año ha resultado seleccionada la propuesta ‘Te regalo un deseo’. “La propuesta gira alrededor de los deseos no materiales, aquellas pequeñas grandes cosas que dan sentido en la vida: una sonrisa, un abrazo, una noche llena de estrellas u otros momentos inolvidables”, explica Joana Cervera, madre de Ànnia y presidenta de la Asociación 8.000 estels. La decoración está inspirada en el cuento ‘Els 8000 estels de l’Ànnia’ (Editorial Tramuntana), basado en su historia de superación como paciente oncológica: parte de los beneficios obtenidos con la venta de este cuento solidario se destinan a la investigación y divulgación sobre el cáncer infantil del Vall d’Hebron Institut de Investigación (VHIR), en concreto al proyecto ‘Inmunoterapia personalizada en la lucha contra el cáncer cerebral infantil: estudio de niveles de antígenos en terapias combinadas’, liderado por el Dr. Miguel Segura, investigador principal y jefe del laboratorio de tumores neuronales dentro del grupo de Cáncer y Enfermedades Hematológicas Infantiles del VHIR; y la Dra. Anna Llort, del Servicio de Oncología y Hematología Pediátricas del Hospital Universitario Vall d’Hebron e investigadora principal de Cáncer y Enfermedades Hematológicas Infantiles del VHIR. “Estamos muy agradecidos a los alumnos de las escuelas de la Fundación Collserola para que pongan su creatividad al servicio de decorar el Hospital Infantil por quinto año consecutivo. Su preciosa decoración es una iniciativa de humanización que contribuye a hacer más amable la estancia de los niños y adolescentes con cáncer y mejorar su bienestar emocional”, expone Esther Diaz, enfermera supervisora del Servicio de Oncología y Hematología Pediátricas. “La Ànnia es un ejemplo de la resiliencia de los pacientes pediátricos, animando sus compañeros de clase mientras hacía frente a su enfermedad para que otros niños, niñas y adolescentes que afrontaban tratamientos oncológicos en el Hospital Infantil también disfrutaran de un entorno navideño y se vieran reconfortados al pensar que otras personas de su edad se habían esforzado en hacer estas decoraciones a mano”, expone el Dr. Lucas Moreno, jefe del Servicio de Hematología y Oncología Pediátrica de Vall d’Hebron.